viernes, 29 de junio de 2012

Kobolds

El kobold (ocasionalmente Cobold) es un duende originario de la mitología germánica que ha sobrevivido hasta los tiempos modernos en el floclore alemán. Aunque generalmente es invisible, el kobold puede materializarse como un animal, fuego, un humano o una vela. Las representaciones más comunes de los kobolds los muestran como figuras humanoides del tamaño de niños. Estos seres tienen diferentes características que varían según su hábitat. Aquellos que viven con los humanos en sus casas, suelen vestir ropas de campesinos, los que viven en las minas son feos y encorvados, y los que viven en los barcos usan ropas de marinero y fuman en pipa.

Las leyendas hablan, principalmente, de tres tipos de kobolds:
Los más comunes son espítus del hogar de naturaleza ambivalente, que suelen realizar tareas domésticas y que gastan bromas pesadas o hacen trucos maliciosos si se sienten insultados o abandonados. En algunas regiones, Kobolds son conocidos por los nombres locales, como el Galgenmännlein del sur de Alemania y el Heinzelmännchen de Colonia. Otro tipo bastante habitual de kobold son aquellos que frecuentan lugares subterráneos como minas. El tercer tipo de kobold, el Klabautermann, vive en los barcos y ayuda a los navegantes.

Las leyendas, cuentos y rumores sobre los kobolds en el folclore es una muestra de la supervivencia de costumbres paganas tras la cristianización de Alemania. El origen de esta creencia se remonta aproximadamente al siglo XIII, cuando los campesinos alemanes tallaban efigies de kobolds en sus hogares. Tales prácticas paganas pueden venir influenciadas por distintos espirítus del hogar de otras culturas, como los kobaloi griegos, lres y penates romanos o las creencias nativas alemanas en una sala de espíritus similares llamados kofewalt (cuyo nombre puede ser la raís del termino kobold). El hecho de que las leyendas sobre kobolds resulten similares a otras criaturas del folclore de otras regiones de Europa parece indicar un orígen común a todas estas criaturas o, simplemente, la influencias cruzadas de diferentes pueblos del continente. De la misma forma, los kobolds subterráneos pueden compartir su origen con otros espíritus subterráneos, como gnomos y enanos y el Klabautermann acuático con similares criaturas acuáticas.

El nombre del elemento cobalto proviene del nombre de esta criatura, ya que los mineros mediavales consideraban que la toxicidad de los minerales ricos en arsénico de este metal (cobaltita y esmaltita) eran debido a la influencia de los kobolds.

Kobolds hoy
  • Dungeons & Dragons. En Dungeons & Dragons, los kobolds son pequeños seres reptilianos (o con cabeza de perro, dependiendo de la versión) que no suelen ser considerados como grandes peligros para las demás razas debido a su tamaño, pero no así por su fiereza. Son débiles en combate y afirman que por sus venas corre sangre de dragón.
  • Warcraft y World of Warcraft. Los Kobolds son hombres-rata de estatura variable que habitan en minas abandonadas o tomadas a mineros, extrayendo minerales de ellas. Su vestimenta principal parece basarse en parches de lino coloridos, pobremente cosidos entre sí, así como usar de armas mazos de piedra, bastónes o picos de minería. Todos llevan una vela de cera encendida en lo alto de la cabeza, y odian que se las quiten. Recuerdan principalmente a los kobolds subterráneos.
  • Ragnarök. Los kobolds son criaturas de tamaño reducido y con cuerpo de perro, orejas puntiagudas y pelo azul, esta raza usa hachas mazos, arco y flecha, en este último el kobold arquero es amarillo y con orejas caídas.
  • Kingdoms of Amalur: Reckoning. Los kobolds son humanoides con aspecto de rata armados con lanzas. Están presentes a lo largo de todo el juego.
  • Harry Potter. En lo largo de la saga de Harry Potter, aparece Dobby, un elfo domestico que debe servir a la familia Malfoy. Pero a pesar de ser otra especie de ser mágico, Dobby reúne varias características originales de los Kobolds (cuerpo pequeño, orejas largas, mal vestido, servidor domestico y algo malicioso).

lunes, 25 de junio de 2012

Books from the Crypt #0: Se abren las puertas

Se abren las puertas de una nueva sección de la ciudad osaria. La Necrópolis de la Luna Negra despliega sus encantos malditos y su atracción innombrable hacia nuevos visitantes a través de nuevos contenidos.

Books from the Crypt es una nueva sección que he querido añadir al blog y que irá dirigida a la crítica y reseña literaria. Hasta ahora, el cajón de sastre que es esta isla en el inmenso mar de la red y el archipiélago de la blogosfera, incluía todo tipo de contenidos relacionados con la fantasía, el terror y la ciencia-ficción sin mucho orden aparente en su presentación. Y es que, las entradas van surgiendo según mis caóticos criterios de selección, incluyendo referencias a autores, festividades, mitos, etc. Tan sólo había incluido una sección fija, entendiendo esta como un formato de opinión consagrado a una temática particular: Yo, Morlock, en la que expreso mis críticas, pensamientos y juicios con respecto a la actualidad socio-política.

Sin embargo, llevo dándole vueltas durante un tiempo a un nuevo apartado de crítica y opinión, en este caso, literaria. Y, finalmente, he decidido darle forma mediante esta nueva sección: Books from the Crypt. Este espacio se dedicará a la crítica y reseña de obras literarias y de comic (incluyendo aquí novelas gráficas, comic europeo, americano, indie, manga, etc.) que caigan dentro de los géneros o temáticas ya habituales en este blog: fantasía, terror y ciencia-ficción. No niego que pueda caer alguna otra obra de otros géneros o temáticas, pero esto será más ocasional que habitual. Por supuesto, mi intención es hablar de lo bueno y lo malo que caiga en mis manos. ¿Por qué? Muy sencillo, trato de promocionar las creaciones que valgan la pena ser leídas, que sean recomendables, incluso imprescindibles, pero también de advertir de lo malo, lo que no debería haber salido de la imprenta por su baja calidad y de aquello cuyo publicación resulte un castigo a la inteligencia y el buen gusto.

Una cosa dejo bien clara, al igual que en Yo, Morlock, mis opiniones serán vehementes, crudas  y duras siempre que lo considere necesario. No voy a caer en la descalificación gratuita ni el insulto fácil, pero no voy a coartar mi discurso si considero que un libro o comic reseñado es malo. Y tómese nota que he dicho "considero", pues, ante todo, las opiniones que aquí se reflejarán no dejarán de ser personales. Las críticas, tanto buenas como malas, serán producto de mis gustos y consideraciones, por lo que no invito a la gente a que, automáticamente las acepte como dogma de fe. Habrá quién esté de acuerdo conmigo y quién considere que me he equivocado en mi exposición o razonamientos. En cualquiera de los casos, invito a quien quiera comentar, discutir o negar mis opiniones y argumentaciones, a que se exprese mediante comentarios en las respectivas entradas. Con gusto, responderé a cualquier sugerencia, duda, crítica o anotación, siempre que se haga con el debido respeto a las buenas maneras y la ortografía.

Finalmente, quiero añadir que mis criticas se referirán, habitualmente, a obras, no a ediciones concretas, por lo que puedo reseñar, por ejemplo, relatos cortos específicos, sin necesidad de referirme a tal o cual antología de alguna editorial en particular. Quisiera, también, recomendar a aquellos interesados en leer más críticas y reseñas literarias de calidad, se pasen por Leo, Luego Existo, blog literario de Lady Boheme, a quien dirijo mis más sinceros y agradecidos saludos por su excelente trabajo.

martes, 12 de junio de 2012

Yo, Morlock #13: El "orgullo" de ser español

"Yo soy español" parece haberse convertido nuevamente en nuestro particular himno nacional. La Eurocopa de Futbol de Ucrania-Polonia nos hace revivir el orgullo patrio, inflamando nuestra bolsa escrotal, produciendo la ya conocida inflamación gonadal que acompaña a estas muestra de españolidad máxima y avasalladora que recorre como una pandemia a la población de esta nación o, como nos recuerda Rajoy con sus palabras "Reino de España". Ante esta febril oleada color rojo y amarillo, encabezada por la embestida imparable del toro hispánico, las gentes ven sus ojos cubiertos por una neblina carmesí que les ciega y les hace seguir un comportamiento cerril, imitando el obtuso comportamiento de los bóvidos e ignorando flagrantemente cualquier otro asunto sin importar su urgencia, gravedad y/o importancia.

Esta muestra fatua de orgullo patrio no es más que una muestra de la indolencia en que nos sumerge ese espectáculo (que no deporte, pues cuando se mueven millones de euros y se trata como una atracción de masas con las que se convierte a individuos racionales en masas enfervorecidas y fanáticas) en el que 11 hombres en pantalón corto y con abultados sueldos se enfrentan a otros 11 supuestamente defendiendo los colores del equipo/nación para el que jueguen. Este particular circo mediático ha venido en el momento más afortunado para nuestro Presidente Pasmado. El comienzo de la Europoca de Futbol ha venido a coincidir con una de las más nefastas noticias recibidas en nuestra democracia, el rescate/intervención por parte de Europa, que, "magnánimamente" ha aceptado hacer una inyección de capital para tratar de solventar la paupérrima y desastrosa situación económica de nuestro país.

Tras los desastres de las autonomías (con la Comunidad Valenciana dispuesta a demostrar que un gobierno del PP siempre lo puede hacer peor), la caída en picado de nuestros bancos (la CAM vendida a precio de saldo a Banco Sabadell tras sus desastrosas cuentas) y ahora la devacle de Bankia cortesía de Rodrigo Rata, perdón, Rato, quien, con su gestión y la de su equipo ha conducido a un nuevo desastre, finalmente nos llega la ayuda desesperada y de último recurso. Este rescate por parte de Europa nos despoja de nuestra soberanía, pues, si hasta ahora el pueblo era ridiculizado, ignorado y castigado por ejercer sus derechos democráticos, ahora ya cae más bajo todavía. Finalmente, nuestros políticos tendrán que responder ante Europa de forma definitiva y terminal. El pueblo ya no cuenta como herramienta de poder y decisión. Podemos decir adios a la democracia, pues la poderosa UE es quien ahora dirigirá nuestras cuentas, marcará el camino a seguir y las medidas a tomar para poder salvar nuestra economía.

Sin embargo, gracias al fubtol y al ya famoso "Soy Español", podemos darnos por vencidos, pues estos días los resultados deportivos actúan como un telón de acero, más que una cortina de humo, para apartar la atención de los españoles. Como si la nación hubiera sido sometida a un lavado de cerebro general, el grueso de los habitantes de este país ha quedado obnubilado, hipnotizado por ese cuerpo esférico al que le dan patadas los acaudalados "representantes" de nuestro país en la selección "española". Podeis estar orgullosos, pues aunque el país se hunda, la economía corra grave peligro y nos convirtamos en los siervos leales de Europa, agachando la cabeza serviles ante sus mandatos, el futbol no os faltará.

viernes, 1 de junio de 2012

Objetos Divinos: Zodiaco

Objetos Divinos: Zodiaco es un nuevo suplemento que he diseñado para Grecia: El Juego de Rol de Juan Carlos Morello.

Se trata de una recopilación de 12 nuevos objetos divinos relacionados con los signos del Zodiaco. Con la excepción de Aries y Capricornio, que fueron diseñados por Juan Carlos Morello y aparecieron por primera vez en el suplemento Objetos Divinos, todos los demás artefactos han sido desarrollados por mí.

Debo agradecer a Juan Carlos, creador de Grecia por su apoyo en la creación de este suplemento y su trabajo de edición y maquetación.

Con Objetos Divinos: Zodiaco, se abren nuevas posibilidades para Grecia: El Juego de Rol, con una mayor oferta de artefactos creados por los dioses y relacionados con la extensa y amplia mitología griega. Gracias a este suplemento, los directores de juego podrán otorgar a sus héroes objetos como la Égida de Carcinos (Cancer), el Arco de Quirón (Sagitario) o el Báculo del Escorpión (Escorpio), además de conocer las leyendas que dieron origen a los diferentes signos zodiacales.

Objetos Divinos: Zodiaco